Frecuentemente alguien ya dijo algo que yo quería decir de una forma mucho más articulada de lo que sería posible para mis habilidades actuales. Este es uno de esos casos, un texto que el artista marcial, campeón de wushu (a los 19 años), productor y actor Li Lianjie, más conocido en el mundo como Jet Li. Desafortunadamente su página personal, donde publicó este texto en 2010 desapareció en el limbo virtual y no se puede hallar ni siquiera en archive.org ... lo encontré en un DVD de respaldos, Se trata de una traducción al español de un texto originalmente en mandarín al inglés usando la herramienta traductora de Google en el 2011.
Asumo la tarea de darle un poco de eco, porque son ideas muy interesantes.
La definición del wushu
He entrenado wushu por veintiocho años. En el camino, he conocido a miles de artistas marciales y he sido testigo de un sinnúmero de estilos, y he asimilado mucho de ellos. Aquí está mi opinión del estado general de las artes marciales; del wushu en particular.
Wushu, traducido literalmente, significa artes marciales. (Wu = "marcial, Shu = "forma artística"). Los artes marciales tradicionales tienen su orígen y propósito en la supervivencia. La cacería, recolectar alimento, protegerse contra las agresiones de la naturaleza, sobrevivir condiciones climáticas adversas, y muchas necesidades más propiciaron el nacimiento de este tipo de comportamiento. Por sí solo, wu es solo pelea, ataques basados en lo militar. Combinado con shu trasciende de nivel y se convierte en una habilidad compleja, con propósito.
El wushu se adapta a las necesidades contínuamente cambiantes de la gente que lo practica. La sobrevivencia es su único proósito constante; lo que cambia son las amenazas y circunstancias en las que la gente se encuentra. Al inicio, como ya he señalado, la gente usó las artes marciales para protegerse de la naturaleza. Cuando la raza humana se graduó de un estilo de vida nomádico a establecer múltiples aentamientos, de pronto se encontraron combatiendo entre ellos, así que las formas de las artes marciales se modificadaron para adaptarse al combate de personas con otras personas. Es básicamente la misna historia relatada en distintas dimensiones: pelear para protegerse uno mismo, pelear para guardar sus bienes, combatir por una ciudad, entablar guerras por un país. En cada situación reside por debajo exactamente el mismo propósito: sobrevivencia.
Demos un paso a la civilización de nuestros días -- la historia nos dicta una vez más que el wushu modifique su conducta y su forma de exhibirse. ¿Qué significa? Con la llegada de tecnología, se tienen pistolas, cañones, bombas nucleares y otras armas. Aprender wushu no cumple el propósito de defenderse mano a mano de un depredador, invasores y similares. Hoy en día, si matas o hieres a alguien con un movimiento impresionante que aprendiste tras diez años de estudio intensivo de wush, esto no te ayuda a sobrevivir. La policía te procesará por asesinato, la sociedad fruncirá el seño en tu contra, y esa hazaña sería producto del mismo esfuerzo llevado a cabo por jalar el gatillo de un arma de fuego. Hoy en día, la sociedad valora la exhibición y práctica del wushu en formas diferentes; tenemos eventos olímpicos transmitidos de forma masiva a la mitad del mundo como entretenimiento. Tenemos películas de acción en las que los personajes se expresan por medio de movimientos fluidos de artes marciales. En el presente, wushu puede pavimentar el camino de una carrera que provea de grandes beneficios económicos. Billetes grandes que se pueden traducir a un estándar de vida más alto, interpretable como una ventaja para la sobrevivencia. Notemos que la meta (sobrevivir) es la misma, es el camino a esa permanencia en el mundo de los vivos lo que se modifica. Otra forma en la que las artes marciales mejoran nuestras oportunidades de sobrevivir (y es, en mi opinión, la mejor razón de todas) es que nos permiten realizar ejercicios que fortaleciendo el cuerpo mejoran la salud. Sin prestar importancia de que uno sea del pasado, presente o futuro, siempre tendremos que atender y cuidar nuestro cuerpo. La defensa personal es otra razón por la cuál alguien decida entrenar un arte marcial, pero no soy partidario de promover este fin en particular. Si encaramos un problema de esta naturaleza, suele ser un mejor recurso contar con figuras de autoridad confiables.
Aquí quisiera hacer una distinción importante. Muchas personas pueden percibir que solo el wushu ha cambiado durante el curso del desarrollo humano en la historia, pero demos un vistazo a cualquier deporte hoy en día; al boxeo, por ejemplo. Hace mucho, mucho tiempo, sin duda se originó como una forma de supervivencia antes cicunstancias primitivas y duras. Se boxeó para matar a un atacante. Pero las cosas cambian, y eso no es algo que la gente practica. Algunos desean una carrera ilustre en la escena deportiva, para poder sostener una vida con lujos. Lo mismo va con la lucha, la esgrima, arquería y otros deportes - se van adaptando acorde a las necesidades y condicones cambiantes de la historia.
Otro pequeño detalle que considero interesante: Hoy en día, asociamos la palabra Kung-fu con patadas, golpes, campeones de artes marciales, con pelea; pero, el significado original de "kung-fu" nunca llevó la intención de describir artes marciales. Al decir kung-fu la gente se refería al tiempo y esfuerzo invertido en aprender y dominar algo. Un chef exitoso dedica mucho "kung-fu" a cocinar los platillos más deliciosos. Un doctor atraviesa por "kung-fu" considerable para cuidar de sus pacientes. Un artista marcial usa "kung-fu" al practicar sus formas físicas para poder deplegarlas ante una audiencia. Este término se le presentó a una audiencia occidental por Bruce Lee cuando fue el centro de atención ante el mundo del espectáculo y lo usó para describir sus artes marciales. De ahí, la malinterpretación creció y mucha gente comenzó a usar el término "kung-fu" para referirse a todo lo relacionado con las artes marciales de China. Así que se trata de un nombre poco apropiado, una palabra cuyo significado se expandió para englobar ideas distintas de su propósito original.
La definición del wushu
En mi última entrada sobre wushu, expresé mis puntos de vista sobre su propósito fundamental, las razones por las que contínuamente cambia para adaptarse a las necesidades, perpetuamente cambiantes, de la sociedad humana. Les hablé sobre las cuatro diferentes metas alrededor de las cuales la práctica del wushu se estructura en la sociedad moderna: Competiciones olímpicas, dobles de acción para filmes/TV, defensa personal, y salud.
Mucha gente, incluyendo fans, se me han acercado con la pregunta sobre cómo deben de entrenar en artes marciales para alcanzar uno de esos cuatro objetivos. Aquí es donde, usando mis experiencias personales, intentaré proveer un marco muy generalizado dentro del cuál cada individuo puede perseguir sus propias metas en wushu. Es importante recordar, antes que nada que se trata de lineamientos muy generalizados, y que a fin de cuentas tu desempeño va a diferenciarse mucho porque depende de diversos factores entre individuos, que van desde el tamaño de su cuerpo, la edad, personalidad y muchos otros aspectos vitales.
Lo primero que suelen preguntarse es, ¿hay un requisito mínimo de edad para el wushu? ¿es muy tarde para mí para empezar a entrenar? Y la respuesta radica en donde tenga la mira cada individuo. Si se desea mejorar la salud o disfrutar el deporte por su propia naturaleza, la edad suele ser irrelevante. Una persona de más de setenta años puede comenzar y entrenar diferentes formas de wushu si su propósito cae en mejorar los aspectos de salud en su vida. Sí, en cambio un individuo aspira a aconvertirse en un atleta competitivo de wushu, recomiendo que empiece lo antes posible. De preferencia antes de los trece años. Si retrasan su entrenamiento hasta cumplir quince, será considerablemente más difícil (pero no imposible) alcanzar ciertos niveles de habilidad.
El enfoque de ser un atleta de clase mundial es quizá el más complicado de conseguir de los cuatro objetivos. Hasta convertirse en doble de acción para la industria del entretenimento es mucho más fácil. Uno puede comenzar su entrenamiento de stunt al cumplir dieciocho y ser bastante bueno en ese campo, tras por decir, tres años de entrenamiento.
Otra pregunta frecuente es: ¿cuántas horas al día debo entrenar? De nuevo, el factor más importante a considerar es la finalidad individual. Si se quiere ser atleta, se requiere de un entrenamiento comparativamente riguroso. El equipo de Wushu de Beijing , por ejemplo, entrena un promedio de cinco a ocho horas diarias.
Por otro lado, aquellos que practiquen wushu con propósito de beneficios a la salud no necesitan someterse a tantas horas. El papel que juegan las diferencias de edad y salud van a determinar cuánto le debe dedicar una persona a su entrenamiento diario. Dos horas de ejercicios de wushu pueden servirle perfecto a un adolescente joven y sano; un adulto de más de setenta tiene que regular una cantidad menor de tiempo.
Realizar el trabajo de un doble de acción para películas y televisión requiere un tipo de entrenamiento completamente diferente de que es generalmente enseñado por academias de artes marciales. La cámara captura solo un ángulo específico de todo el proceso de las acciones de combate. Solamente vemos el rostro de un actor en ciertos momentos; para los dobles muchas veces se capturan solo brazos, piernas o una parte del cuerpo específica. Así que el concepto de que todo el cuerpo debe moverse de manera simultánea, una idea altamente reforzada por las instrucciones tradicionales, no juega un papel tan importante como muchos pensarían. Para hacer películas con escenas de acción, lo más importante será su relación y experiencia con los ángulos de las cámaras.
Mucha gente duda de entrar a este rubro por que perciben que se viven situaciones de alto riesgo, hasta mortales. El negocio de stunts de Hollywood, por lo que he visto, tiene un enfoque en la seguridad y es relativamente seguro. Las muertes son raras, pero el riesgo de lesiones musculares o de fracturas siempre estará presente.
En Hollywood, este negocio es mucho más específico que su contraparte en Hong Kong. ¿A qué me refiero? A que en las películas de acción existen una gran variedad de actividades a llevar a cabo, de saltar por edificios o conducir automóviles a realizar coreografías de pelea. Cada tipo de acción tiene una persona diferente a la que se le asigna una tarea para la que es entrenado específicamente: El tipo que salta por un risco suele ser alguien diferente del que reemplaza en combates al villano de la película o el que atraviesa una cortina de fuego.
Por otra parte en Hong Kong los dobles suelen estar listos para llevar a cabo un gran abanico de escenas de riesgo. No solamente deben de tener una noción de artes marciales, sino que deben saber manejar escenas que lleven flamas, zambullirse en agua, hacer acrobacias y más.
¿Cómo protegerse entonces, como doble, de daños potenciales? Lo que puedo reocomendar es buscar un buen maestro - alguien que conozca qué tipo de entrenamiento es más adecuado prara las condiciones de los sets de grabación. Desafortunadamente, no es una vocación muy popular y los buenos maestros son más difíciles de localizar que un instructor de artes marciales. Tener paciencia para encontrar al instructor acertado es clave, y uno nunca debe de satisfacerse con un maestro de segunda categoría bajo ninguna circunstancia.
Finalmente está el asunto de la defensa personal. Mi conocimiento y experiencia en esta área de las artes marciales es limitado, porque me he enfocado en entrenar los otros tres aspectos de la práctica del wushu. Siento que no es mi lugar dar una opinión específica en el tema. El proceso de entrenamiento debe de estar adaptado al cuerpo de cada individuo, y no existe una colección de técnicas que abarquen absolutamente todo lo que las necesidades personales de defensa práctica requiere a nivel individual.
Las situaciones siempre varían. Es muy complicado determinar bajo qué circunstancias está bien o mal usar las artes marciales en contra de alguien más. Por supuesto, en un escenario ideal debemos por lo general de evitar conflictos y delegar a las autoridades responsables el manejo de situaciones de riesgo. Si un ladrón te tiene ante el cañón de un arma de fuego y demanda tu dinero, quizá sea mejor entregárselo que arriesgar tu vida. Una pistola supera años de entrenamiento en artes marciales en una fracción de segundo. Es importante aclarar la diferencia de lo que ocurre en las películas y en la realidad. Si eres el héroe, el guión dice que patearás el arma fuera de las manos del oponente, pero en la vida real, probablemente no sea el caso, tales garantías no existen.
wushu, pasado y presente
Hace poco se me pidió que compartiera mis reflexiones sobre comparar los atletas de mi generación ante el estado actual del wushu en China. El wushu hoy funciona bajo reglas muy distintas a las que lo hizo en las décadas de 1970's y los 1980's. El wushu de competencia solo existía realmente en China, y las formas eran juzgadas por un solo set de reglas estandarizadas. De pronto las autoridades quisieron expandir el wushu a otros países; formularon un nuevo paquete de reglas para competiciones internacionales. Estas reglas fueron, a mi parecer, más sencillas de cumplir que las reglas Chinas - o quizá funcione mejor decir que fueron simplificadas. Hoy en día se compite principalmente en solo tres categorías: Changquan, Nanquan, Taijiquan. Estos sistemas no son tan complejos como solían ser, antes todo el mundo debía de competir en espada ancha (dao), pica, espada recta (jian), maza, y formas de mano desnuda. En mis días se era un requisito aprender y se evaluavan las Dieciocho-Armas*, estilos internos, externos, todo. Ese era nuestro currículum. En estos días, si se quiere participar en torneos se aprenden las rutinas obligatorias, y es todo.
No quiero indicar con esto que el sistema haya mejorado o empeorado. Puedo decir que la calidad física de los atletas ha mejorado - y que continúa haciéndolo de manera estable. ¿Por qué es que vemos nuevos records romperse cada año? Porque el entrenamiento se ha vuelto más científico. Los atletas tienen acceso a mejores planes de nutrición, mejores vitaminas, mejores servicios médicos, psicólogos del deporte, etc. Todos ellos son factores que han desarrollado el potencial del cuerpo humano por medio del deporte.
Sin embargo, yo ceo que en su núcleo el wushu es mucho peor que antes. Con esto me refiero al conocimiento interior, esas partes del wushu que no involucran aspectos netamente físicos. El cultivo interior solía ser la parte más enfatizada, y definitivamente es algo que está flaqueando. Pudiese ser por las reglas. Los jueces que trabajan bajo las reglas modernas van a preferir cierto tipo de ejecuciones y recompensarlas con una puntuación mayor; como resultado, los atletas se entrenan para satisfacer esos parámetros y ¿cómo culparlos? Las demostraciones de habilidad externa e interna son importantes, pero las reglas nuevas no prestan atención en proteger estas últimas. Una de las cosas más hermosas en las artes marciales suelen ser no deportivas, no son solo sobre velocidad. Creo que lo que los practicantes de wushu necesitan es concentrarse más en los aspectos internos: tienen que tomar el tiempo debido para canalizar sus energías junto con su mente para concluir deliberadamente cada movimiento. La velocidad de las ejecuciones hoy en día es increíble, y los saltos muy altos... y a pesar de esto, hay detalles intermedios que no se buscan perfeccionar. El año pasado, fui a ver al equipo de Wushu de Beijing cuando vinieron a los Estados Unidos a realizar una presentación, y tienen el mismo problema. Siento que el nuevo set de reglas los limita.
No encuentro un sabor personal. En el pasado, cuando veíamos a la gente practicar con espada recta, podías estar seguro que diez atletas de alto nivel mostrarían diez diferentes variantes. Hasta en el sencillo acto de “apuntar” con la espada, cada quién imprimiría al movimiento sus ritmos individuales - todos técnicamente correctos y todos distintos.
Eso era sabroso! Muchos sabores!
Hoy en día: whrrr whrrr whrrr - los atletas parecen máquinas. Se mueven tan rápido que apenas se aprecia lo que hacen, les falta sabor. El wushu no debe ser una carrera. No tiene por qué convertirse en un deporte distinto, donde el atleta más rápido siempre gana. Personalmente, me gusta ver diferentes estilos y modismos. Prefiero cuando las artes marciales mantienen su elemento artístico - cuando los atletas que a su vez son artistas desarrollan y ejecutan su propio estilo de forma distintiva. Las artes marciales tradicionales siempre fueron sobre variedad y diversidad: estilos diferentes, diferentes culturas, diferentes modos de hacer las cosas. Solía ser posible indentificar el lugar de orígen de los competidores por la forma en la que practicaban su wushu: "Oh, este tipo es de la provincia de Shandong" o "Mira, ella debe ser de Shanxi." Podíamos notar eso porque conocíamos las variantes en sus estilos. Ahora, todo se ha homogeneizado y las diferencias son borrosas. Como siempre, es un aspecto constante en las artes marciales, un yin y un yang: mitad y mitad - algo bueno, algo no tan bueno. Siempre existen áreas que pueden ser mejoradas.
*Las ”dieciocho armas” de la tradición shaolin consisten de: sable (dao), pica (quiang), espada (jian), alabarda (guandao), hachas cortas (fu), hacha de combate (ghe), espada gancho (gou), rastrillo (cha), bastón segmentado /látigo (bian), mazas (chui), marro (tie chi), talón/garra (zhua), tridente (tang), garrote (bang), la lanza (ji), cuchillos de luna creciente (yue), cayado (gun), y martillo meteórico (liu xing).